cuando conoció casualmente al vocalista de la banda estadounidense Aerosmith, quien se encontraba en Salvador a causa de su gira “The Global Warming World Tour”.
Porfirio es un chico de 21 años, rockero por influencia de su padre y tío, estudiante de Antropología Sociocultural de la Universidad de El Salvador, y comerciante de bisutería y camisetas estampadas en la ruta hacia El Boquerón.
Javier ante lo sucedido dijo: “De repente se estacionó un microbús frente a mi venta. Vi que se bajó alguien, se dirigió a mí y me dio la mano, era Steven Tyler, no lo podía creer. Cuando lo identifique quede congelado. “No podía creer que alguien de la categoría de Steven estuviera apreciando mi venta, a veces ni personas salvadoreñas lo hacen”.
Javier Ramírez, amante del rock, asegura que charló por casi 15 minutos con Tyler, gracias
a un traductor. “Me preguntó sobre la elaboración de mis productos (bisutería y camisas con aerografía)”, dijo.
Antes de que Steven Tyler se fuera, Javier no desaprovechó la oportunidad de poder tomarse
una fotografía. “Yo no contaba con una cámara, pero le dije a un amigo que me la tomara con su celular”, indicó.
Lo que nunca se imaginaría Javier Ramírez es que la fotografía, publicada en redes sociales,
fuera compartida por miles de personas y comentada por cientos. Solo en el fanpage de LPG la
imagen superó los 10000 likes, fue compartida casi en 2000 ocasiones y obtuvo alrededor de 800 comentarios.
Porfirio dice que el suéter con el que aparece en la fotografía se ha convertido en su amuleto
de la suerte y asegura que no se atreve a lavarlo. También ha dicho que ha vendido
mas después de la visita de Steven y que entro gratis al concierto.
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